descargar 71.55 Kb.
|
LINEAMIENTOS PARA UN PROYECTO REGIONAL DE LA LIBERTAD
1° Los problemas económicos-sociales del Perú no son recientes ni sus causas, superficiales. Sus antecedentes se pueden rastrear por lo menos hasta los orígenes de la república. En el último medio siglo XX hemos tenido periodos de predominio dictatorial y de regímenes políticos surgidos de procesos electorales formales. En ese lapso se aplicaron modelos económicos diversos, pero todos ellos fracasaron. Tal es el caso de régimen dictatorial de Odría y después el modelo liberal; más tarde, la llamada estrategia de “Industrialización por sustitución de importaciones” junto a las reformas del Velazquismo; luego la Contrareforma con Morales Bermúdez. A partir de 1990 la mafiosa dictadura fujimontesinista impuso el Neoliberalismo. Durante el siglo XXI ya van dos gobiernos elegidos democráticamente (Toledo y Alan García) que profundizaron el Neoliberalismo. El gobierno de Ollanta Humala que asumió la conducción del país el año pasado, abandonó su programa inicial de la “Gran Transformación” y lo redujo a la “Hoja de Ruta”. Hoy los hechos confirman que Humala optó por un camino sin retorno; se ha decidido por el continuismo neoliberal. Estamos frente a un gobierno sumiso a los poderes fácticos. Un gobierno con falta de proyección y de visión, abrumado por las exigencias de coyuntura. Somos un país con una historia de frustraciones, fragmentado y desgarrado. La República fundada en 1821 no ha logrado integrar la nación peruana, ni señalar el derrotero hacia el progreso, bienestar y desarrollo. Los 191 años de vida republicana y de vida política del país han estado signados por la acción de caudillos militares y democracias débiles, con clases dominantes que gobernaron de espaldas al país, que se entregaron a la voracidad de los monopolios extranjeros, que se excluyeron a las mayorías de la acción política, ignorándolas en la toma de decisiones y cerrándoles todo canal de representación. 2° El Perú inició el siglo XXI del mismo modo que el siglo XX, con el argumento de que el capital extranjero permitirá la modernización de la economía y que las inversiones en transporte y telecomunicaciones, banca y minería traerán los cambios en los destinos de la población y el bienestar nacional, como se decía en 1890. 3° El Neoliberalismo no es solo Economía; también es debilitamiento del rol del Estado, de la institucionalidad de la democracia. Ha profundizado la crisis moral y la corrupción en la sociedad peruana; ha acentuado las condiciones en que reposa la violencia social; ha introducido el estilo lumpen y mafioso de gobierno (Fujimori y Montesinos); ha reforzado el cinismo y la mentira como estilo de gobierno y devaluado la educación, la cultura y los valores morales. El narcotráfico, la corrupción, la arbitrariedad, las mafias organizadas, con el consentimiento oficial, son parte de este escenario. 4° La cuestión central es el modelo de economía que se ha impuesto en el Perú. Se presenta al neoliberalismo como símbolo de garantía de un crecimiento sostenido y demostración de éxito. Pero lo que tenemos que preguntarnos es a quién beneficia ese crecimiento, en qué condiciones y en qué estrategia de desarrollo. El crecimiento de la economía no significa necesariamente solidez ni garantía de progreso para la inmensa mayoría de peruanos. Este tipo de crecimiento se basa en la demanda externa. El continuo desarrollo de China y su demanda por materias primas, entre otros factores, ha servido para sostener el crecimiento económico del país. Dicho crecimiento se ha basado en el incremento de las exportaciones, principalmente de materias primas como los minerales. Ello se ha debido, en mayor grado, a un aumento en su valor comercial, antes que el crecimiento en cantidad. El índice de precios de las exportaciones, entre los años 2000 y 2010, creció en 189.2 %, mientras que las cantidades se incrementaron en 87.3 %. Una de las fuentes principales del crecimiento económico ha venido por parte de la coyuntura internacional favorable al precio de las materias primas y minerales y no por un incremento neto de la productividad. 5° Las tasas de crecimiento de la economía peruana, en el periodo 2000-2010, se han distribuido de manera muy heterogénea entre las distintas regiones del país. Se estima que algunas han crecido por encima del 5 % (promedio nacional 5.5 %) y otras que crecieron por debajo del 2%, situación que denota una falta de integración entre las distintas economías regionales en el Perú. La región Ancash creció 29.54 % (2000-2010), pero Madre de Dios creció 0.01 %; Huancavelica 0.48 %, Apurímac 1.29 % y Huánuco 1.08 %. Ello coincide con que sean las tres últimas que se encuentran a la cola del desarrollo nacional con altas tasas de pobrezas (Huancavelica 66 % - Apurímac 63 % y Huánuco 58.5 %). Estas dos características revelan una falta de encadenamiento de las economías regionales entre si y una estructura de producción fragmentada en el país. El incremento disparejo contribuye a inflar el nivel de crecimiento de la economía. La Libertad creció 1.99 % en dicho periodo, (promedio). 6° Según datos del INEI, en el Perú la informalidad laboral llega al 66.1 % y en el mejor de los casos, la proporción de trabajadores que accede a todos los beneficios se sitúa en el 30.5 %. En general, las condiciones laborales más adversas se concentran sobre las mujeres, personas con bajos niveles educativos, residentes en zonas rurales y jóvenes que están entre los 15 y 24 años. De cada diez mujeres jóvenes que cuentan con empleo, entre siete y ocho están en condiciones de informalidad. Asimismo, en sectores como la agricultura, menos de uno de cada diez trabajadores accede a beneficios laborales. En general, los sectores económicos que más empleo generan son, al mismo tiempo, los que menos condiciones favorables presentan. El 80 % de los pobres extremos se emplea precisamente en estas actividades. 7° Según el informe Panorama Social 2011 de la CEPAL, el Perú es uno de los países de la región con una heterogeneidad estructural severa, en el que el ingreso del 20 % de la población más rica del país es aproximadamente 18.5 veces superior a la del 20 % más pobre (CEPAL). El análisis de la distribución funcional de la renta permite dar cuenta no solo del grado de concentración del crecimiento económico, sino de la precariedad creciente de la población asalariada del país – a la cual pertenecen, en buena medida, las nuevas capas medias beneficiadas por el crecimiento económico – y el bajo nivel de apropiación de la renta por parte del Estado. En la última década, la mayor parte de la riqueza generada en el país (seis de cada diez soles) es distribuida anualmente como utilidades del capital - es decir, entre propietarios del capital, mientras que solo dos de cada diez soles producidos se distribuyen en remuneraciones, es decir, lo que obtienen los trabajadores, obreros y clases medias asalariadas como pago por su trabajo. Del resto, aproximadamente un sol de cada diez, lo obtiene el Estado por concepto de impuestos. En la última década, América Latina ha crecido a un promedio de 3.5 %, en tanto que Perú creció a un promedio 5.5 %. Sin embargo, el poder adquisitivo del salario mínimo – es decir, el salario mínimo real se ha incrementado en un 50 % en Americana Latina, mientras que en el Perú solo se ha incrementado en un 9 %. Esta tendencia se agrava al analizar la evolución del poder adquisitivo del sueldo promedio de los trabajadores asalariados peruanos: entre 2002 y 2010, el salario real promedio en Perú apenas se ha incrementado un 3 %. Por ello es que los peruanos son tan sensibles a las dinámicas inflacionarias de los productos de la canasta básica familiar. En conclusión: Los datos anteriores confirman nuestra posición de que no basta el crecimiento de la economía. Crecimiento no significa desarrollo ni bienestar de la mayoría de la población. “La capacidad inercial” de inclusión del crecimiento económico es ilimitada e insuficiente. 8° Según un informe de IPSOS-APOYO, ocho de cada diez peruanos piensan que es necesario realizar ajustes a la política económica de los últimos diez años, sean estos moderados (48%) o radicales (31%) (IPSOS APOYO, 2011). Solo dos de cada diez peruanos piensan por el contrario, que se debe continuar con la misma política económica de la última década. 9° Las percepciones ciudadanas en relación a la economía tienen un efecto importante sobre la confianza en las instituciones y el apoyo a la democracia. La situación económica y la evaluación del desempeño del Gobierno están claramente relacionadas, y los ciudadanos evalúan el trabajo de sus gobernantes considerando, entre otras cosas, su propia situación económica. La forma en que los peruanos perciben su economía también afectaría su visión sobre las instituciones democráticas. En la última década, según datos de Corporación Latinobarómetro, solo el 17% de los peruanos declaró estar “satisfecho” o “muy satisfecho” con el desempeño de la democracia, cifra que es la mitad del promedio Latinoamericano (35%) para el mismo periodo. 10° El modelo económico actual privilegia la inversión extranjera que se concentra en la actividad primario-exportadora a la vez que descuida el mercado nacional. El modelo ha permitido la concentración de la riqueza así como la monopolización de sectores básicos de la economía y las finanzas continuando la vieja herencia colonial de productores de materia prima para exportación. El mito de la inversión extranjera encubre el hecho real de que su objetivo no es el desarrollo y progreso del país sino la máxima tasa de ganancia. La acumulación no es hacia adentro sino hacia el exterior. 11° No tenemos educación y salud de calidad; tampoco ciencia y tecnología, conocimiento e innovación; tampoco Industrialización. En tales condiciones no se puede hablar de modernidad. El Perú sigue siendo un país de pobres, de trabajadores por cuenta propia o con trabajo precario, con un sector privilegiado que no excede el 20 por ciento de la población. 12° El centralismo económico continúa como uno de los grandes males que impiden construir una sociedad integrada, con igualdad de oportunidades para la gente. En pleno siglo XXI subsiste la exclusión social y étnica. La concentración de la riqueza es el rasgo sustantivo del modelo primario exportador por lo tanto, de la polarización social. 13° El tema ambiental - cuya importancia es reconocida por crecientes sectores de la sociedad peruana – ha logrado en la lucha del pueblo de Cajamarca un hito especial. Pero hay un problema más de fondo. Ha puesto en evidencia el modelo de desarrollo basado en la explotación de recursos naturales, como es el caso de los minerales; modelo que no genera desarrollo, progreso ni bienestar para la mayoría de peruanos. Así ha sido a lo largo de la Republica. Data de 1902 la llegada al Perú de la Empresa Cerro de Pasco Mining Corporation de Estados Unidos y se estableció en la Ciudad del Cerro de Pasco. Por esa época se estableció en la sierra de la Libertad (Quiruvilca) la compañía de EE.UU. Northem Perú Mining. Ambas empresas explotaban casi todo el cobre y la mayor parte del oro y la plata del país. Estamos en la segunda década del siglo XXI y ni Cerro de Pasco ni Quiruvilca han logrado desarrollo y bienestar para su población. Tampoco Huancavelica ni Cajamarca, donde minera Yanacocha ya está 20 años. Hoy ya no están las antiguas empresas extranjeras; hay otras, pero la esencia del modelo no ha cambiado. Está la estadounidense Newmont, accionista de Yanacocha. En La Libertad está la transnacional Barrick que viene explotando el proyecto Lagunas Norte con perspectivas de ampliación al proyecto Lagunas Sur.
1° UBICACIÓN GEOGRÁFICA: La región La Libertad está situada en el Noreste del país. Abarca gran parte de la costa Norte y una gran sección de la Cordillera de los Andes. Tiene una superficie de 25,500 Km2 (2.7 % de territorio nacional). Sus valles costeros son fértiles, al igual que los interandinos. Hacia el oriente su territorio es recorrido por el caudaloso Marañón. Sus playas tienen una gran riqueza marina gracias a la corriente de Humbolt. Es la única región que abarca las tres regiones naturales (costa, sierra y selva). Se divide políticamente en 12 provincias; 5 están ubicadas en la Costa (Trujillo, Pacasmayo, Chepén, Ascope y Virú) y 7 están en la sierra (Otuzco, Julcán, Sánchez Carrión, Santiago de Chuco, Gran Chimú, Pataz y Bolívar). Tiene 83 Distritos. La capital Regional es la Cuidad de Trujillo, cuya independencia del colonialismo español fue proclamada el 29 de diciembre de 1820. 2° POBLACIÓN Y MOVILIDAD SOCIAL: Su población es de 1’725,075 habitantes. Trujillo tiene más del 50 % de la población total. Las provincias más pobladas son: Trujillo (811,979 hbts), Sánchez Carrión (136,221 hbts), Ascope (116,229 hbts), Pacasmayo (94,377 hbts), Otuzco (88,817 hbts), Virú (76,710 hbts). Las que tienen menos población son: Gran chimú (30,399 hbts) y Bolívar (16,650 hbts). En la costa el nivel de vida es superior en términos de índice de desarrollo humano, a las provincias de la sierra. En los últimos 40 años ha habido una fuerte migración de la sierra a la costa. El censo de 1940 estableció que el 70 % de la población liberteña vivía en la sierra, pero el censo de 1993 dio como resultado que el 70 % de la población vive en la costa (es decir, al revés). Según el reciente IV Censo Nacional Agropecuario, realizado por el INEI, La Libertad es la quinta región con mayores productores agrícolas del país al registrar 32,607 personas, de una total 2’229,772 productores que existen en todo el país. La cifra nacional muestra un incremento de 528,106 nuevos productores agrícolas (30% más) frente del censo de 1994. 3° SECTORES PRODUCTIVOS El sector económico más importante de la región es el manufacturero, que tiene varios segmentos: la industria del azúcar, la agroexportacion de espárragos y alcachofas (frescos y en conservas), la industria galletera, la producción de embutidos, la producción de cemento (en Pacasmayo), la producción de calzado, la industria metal-mecánica. Históricamente, la exportación de La Libertad se concentró en el azúcar; después en los espárragos y ahora en la alcachofa y en el ají páprika. El 67% del total de las alcachofas exportadas por el Perú, procede de nuestra Región. Otro rubro que crece es la elaboración de harina de pescado en Puerto Chicama con la instalación de varias fábricas. Con el ingreso de la minera Barrick, el sector de la minería (de oro) es otro rubro de la Región. El Turismo es otro potencial histórico y cultural. Chan Chan era antes el centro indiscutible para el turismo; actualmente la Huaca de la Luna concentra el mayor número de visitantes (este proyecto obtuvo el premio internacional Reyna Sofía de Conservación en el 2006 y 2007). Otro centro turístico es el complejo El Brujo, (prov. De Ascope) donde se encuentra la Dama de Cao. La producción de arroz es la característica del valle de Jequetepeque (provincia de Pacasmayo y Chepén) cuya fuente de agua es el rio del mismo nombre que nace de la sierra cajamarquina. Para regular el manejo del agua se construyó la represa de Gallito Ciego que ya presenta problemas de sedimentación. La pequeña agricultura se desarrolla en la costa y provincias de la sierra, en la que se cultiva papa principalmente, pero sin ningún apoyo estatal; también se produce trigo y cebada, maíz amarillo duro. Trujillo fue considerada como una cuidad de alto crecimiento económico entre los años 2006-2007. Su PBI creció 12.7 %. Sin embargo, este crecimiento del PBI no ha generado desarrollo. Se observan cifras significativas de crecimiento pero en medio de la desigualdad. Por lo demás, la fuente de ese crecimiento excluyente está en la minería (sobre todo con el ingreso de la minería Barrick) y en el sector agroexportador del proyecto Chavimochic. Esta “bonanza económica” – que sólo favorece a pocos - no ha generado, progreso ni bienestar en las provincias de la región. 4° SÍNTESIS DE LOS PROBLEMAS DE LA LIBERTAD La Región La Libertad no es ajena a los añejos problemas estructurales del Perú. En forma específica, persisten los grandes problemas como: crecimiento desequilibrado, concentración de la propiedad y de la riqueza, abandono de la pequeña y mediana agricultura, deficiente infraestructura vial, desempleo subempleo; analfabetismo, contaminación ambiental, delincuencia en alto nivel, etc. La siguiente es una síntesis de los problemas de La Libertad:
La Región La Libertad no ha logrado su desarrollo y bienestar para su población tras haber visto desfilar Corporaciones Departamentales de Desarrollo, ORDES, Presidentes y Asambleas Regionales, etc., a lo largo de la vida Republicana.
1º CAMBIO DE RUMBO. El Perú requiere un cambio de rumbo integral para encontrar la ruta del desarrollo, el progreso y el bienestar de la población. No habrá salida a la crisis del país sin acabar con el modelo neoliberal que ha destruido la economía, ha sometido al país al saqueo de las transnacionales y sus socios nativos, afianzando el centralismo, ahondando la polarización entre ricos y pobres, arruinando a los sectores medios y liquidando los derechos de los trabajadores. 2º Siguiendo el camino de Mariátegui, necesitamos “peruanizar al Perú”, sobre tres principios fundamentales que estableció el Amauta: A) Conocer la realidad; B) El conocimiento de la realidad nacional debe empezar fundamentalmente por el conocimiento de la realidad económica; C) Priorizar el factor humano. Peruanizar al Perú es todo un programa político y cultural que hay que realizarlo con el pueblo y para el pueblo. 3º El Perú necesita cambios de fondo y no paliativos, dado que sus raíces son estructurales. El Partido tiene su táctica general para un periodo de tránsito hacia el socialismo. Es la táctica del NUEVO CURSO (nuevo rumbo, nuevo camino); es una propuesta de reformas que tiene cuatro ejes fundamentales: la Nueva República, el Proyecto Nacional, una Nueva Constitución Política que le sirva de base jurídica; y un Gobierno democrático, patriótico, de unidad popular y regeneración moral. 4º Consideramos al nuevo curso como alternativa a la crisis del país. Una alternativa significa:
5º EL PROYECTO NACIONAL. Es la visión de país que queremos construir para salir de la crisis. Es el diseño integral de una nueva realidad. Es la propuesta de un nuevo destino para el país. Los elementos básicos del proyecto nacional son:
El Proyecto Nacional postula:
Aspiramos a construir una región democrática, descentralizada, próspera, moderna, inclusiva, con justicia social, con desarrollo sustentable y éticamente regenerada.
Perú, norte, diciembre del 2012 |